jueves, 25 de octubre de 2007

EL MAL MENOR NO ES UNA OPCION

Se ha instalado nuevamente en algunos la teoría del "mal menor". Ello encierra toda una mentalidad, que en gran medida ha llevado al actual estado de cosas por haber abdicado del coraje a constituir una fuerza verdaderamente representativa y no haberse atrevido en anteriores elecciones ha votar por aquéllo que SI los representaba.
Se vota socialmente -por lo que se aprecia como "políticamente correcto"- y no con sentido político. Prueba de ello fue el voto militar del '83 que en gran mayoría votó por Alfonsín. Este equívoco criterio lamentablemente siguió en las sucesivas elecciones... Como tampoco se percibió el desastre estructural que implicaron los diez años del gobierno de Menem.
Lo correcto es votar por lo que verdaderamente representa nuestros valores, convicciones y políticas y sólo secundariametne votar inteligentemente -eufemismo para referirse al voto por el "mar menor"-
Si Ud. vota por el Partido Popular de la Reconstrucción, paradojalmente podrá satisfacer ambas opciones. ¿Cómo?
Votándonos Ud. está seguro de hacerlo según sus más profundas convicciones y a la par podrá también alcanzar el objetivo, que como fundamento aducen quienes, de buena fe, ven como indispensable conseguir una "segunda vuelta".
El argumento es el siguiente. Según ellos -y es correcto- sólo votando a Rodríguez Sáa se debilita la fórmula del progresismo peronista "K". Pero no advierten que votando al PPR se logra igual cometido. Porque en gran medida el voto tradicional del PPR ha sido el de los sectores humildes y de clase media que votaban las fórmulas peronistas.
Pero lo decisivo es votar no para que determinado sector logre alguna de sus legítimas reivindicaciones, sino para que TODOS LOS SECTORES se desarrollen y progresen moral y materialmente. No hay salida en la opción del voto sectorial e individualista. De esta situación sólo se sale con una renovación moral y política.
Tienen verdadera conciencia que propiciando el "mal menor" lo único que se logra es diferir de modo insustancial el camino de decadencia en que vivimos desde hace ya más de veinte años???
Hoy tienen una nueva oportunidad para votar por hombres de bien, con sentido político, que saben qué hacer, con sentido de familia, preocupación y responsabilidad por los grandes sectores de población cada vez más marginados de la educación, la salud y el progreso económico.
Vote por el real, posible y verdadero cambio.
Mauro M. Segret

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